TRANSPLANTE DE ROSTRO

El hombre que fue sometido a un trasplante de cara el pasado martes en Sevilla permanece ingresado en la UCI del hospital Virgen del Rocío, pero está consciente, ya se comunica y ayer por la tarde se levantó de la cama por primera vez. Según el doctor Tomás Gómez Cía, director de la Unidad de Gestión Clínica de Cirugía Plástica y Grandes Quemados y coordinador de la operación, el paciente “evoluciona favorablemente” y ya ha pasado el peligro del rechazo hiperagudo que puede producirse en los primeros momentos del implante. Con todo, los médicos se mantienen alerta para intervenir ante la posibilidad de cualquier rechazo menor. “Como en cualquier trasplantado”, aclaró el doctor David Gómez Padilla, director de la Unidad de Cirugía Maxilofacial.




El equipo médico que llevó a cabo el trasplante ha comparecido hoy ante los medios de comunicación para explicar la intervención, la segunda de este tipo que se realiza en España y la décima del mundo. La de Sevilla ha aportado algunas novedades técnicas. La primera, un programa informático desarrollado por el hospital para planificar la operación, que ha permitido reproducir virtualmente la fisonomía exacta del rostro del paciente para poder valorar las necesidades y ensayan la intervención. Además, por primera vez en un trasplante facial, el tejido del rostro del donante se conectó a la arteria femoral (en la ingle) del receptor para asegurar un buen riego sanguíneo, lo que reduce las posibilidades de un rechazo hiperagudo y trabajar con tranquilidad sobre el rostro del paciente antes del trasplante en sí.



Hacia mitad del siglo 20 nadie se imaginaba que transplantar el rostro sería posible. Pero ahora lo es. Claro, aún faltan años para perfeccionar la técnica pero los resultados son bastante prometedores.